Cuando nos enfrentamos a un trámite legal siempre consideramos que el profesional indicado para gestionarlo es un abogado. Pero cuando el procedimiento es la regularización de una vivienda o construcción ilegal, no se trata de un abogado sino de un arquitecto quien asume ese proceso.

En este artículo detallaremos todo lo que debes saber si necesitas legalizar una vivienda u otra construcción, desde el papel que asume el arquitecto, hasta qué pasos se han de seguir o qué derechos y deberes conlleva el trámite.

La figura del arquitecto en la legalización de una vivienda

El objetivo de legalizar una vivienda es dejar constancia legal de que se haya construido, por lo que es el ayuntamiento el que debe aceptar su legalidad. De ahí que la responsabilidad de regularizar resida en el arquitecto. Así, el trámite sólo consta de documentos técnicos que son competencia directa de un arquitecto. Por otro lado, los trámites “legales” a los que se somete el expediente no requieren el servicio de un abogado.

Es importante saber que no es el arquitecto quien legaliza la casa, sino quien proporciona la documentación técnica al propietario para que éste solicite su regulación al Ayuntamiento. El procedimiento se gestiona a través de un expediente de legalización, que acredita la existencia legal de la edificación y su adecuación a la normativa municipal.

Para ello, el arquitecto debe redactar una serie de documentos en los que se responsabiliza de que la vivienda cumple las condiciones de habitabilidad y seguridad que la legislación exige, además de ajustarse a la normativa municipal que corresponda.

Previamente a la redacción y tramitación del expediente de legalización, el arquitecto debe también asesorar al propietario sobre el estado del inmueble y las posibilidades que legalmente tiene antes de iniciar cualquier proceso.

¿Por qué debo legalizar mi vivienda?

En caso de que tu vivienda no esté todavía regulada, existen algunos supuestos en los que será obligatorio hacerlo. Puede ser el mismo ayuntamiento el que exija regularizar la situación de su vivienda y será imprescindible hacerlo para evitar su posible expropiación o demolición.

Su legalización también será necesaria antes de formalizar una venta o alquiler, así como para pedir una hipoteca. Otro supuesto es de cara a una herencia, caso en el que es muy recomendable legalizarla para dejar previamente todos los papeles en orden.

Pasos para regularizar una vivienda

La legalización de una vivienda es un trámite muy sencillo cuya gestión recae principalmente en el arquitecto, y no en el propietario. Los pasos para legalizar una casa serían los siguientes:

• El propietario contrata a un arquitecto profesional para que le asesore, valores si la vivienda es legalizable e inicie los trámites.
• El arquitecto consulta con el arquitecto municipal correspondiente la documentación a presentar. Debe levantar los planos de la casa y realizar el expediente de legalización, recogido en un proyecto técnico.
• El arquitecto acompaña al propietario para que solicite la licencia de legalización presentando el expediente elaborado por el arquitecto.
• Una vez concedida la licencia, el propietario paga las tasas e impuestos como si solicitara licencia de una obra nueva. Estas tasas se calculan de acuerdo al presupuesto incluido en su expediente de legalización. Normalmente supone el 4% sobre el valor que tendría en el momento actual la construcción de la casa.
• El ayuntamiento comprueba que la documentación entregada se ajusta a la edificación existente y otorga la licencia de primera ocupación.
• Con la licencia en mano, el propietario acude a una notaría para registrar la propiedad.

Qué derechos y deberes conlleva la legalización de una casa

El reconocimiento oficial por parte de la administración municipal al legalizar una vivienda o edificación conlleva a su vez una serie de derechos y obligaciones.

En cuanto a derechos adquiridos, se otorgan todos los inherentes a la condición de legal de la construcción. Es decir, la vivienda o edificación podrá contar con todos los servicios urbanísticos tales como luz, agua, evacuación de residuos, basuras, accesibilidad, etc.

El propietario queda también obligado a ingresar todos los impuestos municipales a los que está sometida esa determinada construcción.

Si necesitas legalizar una vivienda, con estas nociones ya conocerás cómo afrontar el proceso y qué pasos debes seguir para tramitar la regularización. El papel del arquitecto es clave no solo a la hora de realizar el expediente de regularización, sino para recibir un buen asesoramiento antes y durante el trámite. Por ello, es aconsejable elegir a un buen equipo de profesionales que esté especializado en este tipo de trámites legales de gestión urbanística.

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