La domótica supone una revolución en la arquitectura al incorporar la tecnología en el diseño inteligente de las viviendas. Así, las casas inteligentes pueden funcionar de manera automatizada gracias a sistemas tecnológicos de gestión energética, comunicaciones, seguridad y bienestar interior. 

El objetivo final de la arquitectura domótica es mejorar la habitabilidad de la vivienda, por lo que esta debe estar diseñada desde el principio del proceso constructivo para adaptarse a las necesidades de cada espacio y familia.

Veamos en qué consiste y qué áreas nos permite controlar de la vivienda, así como sus principales ventajas. 

En qué consiste la arquitectura inteligente

Que la domótica integre la tecnología en el edificio hace fundamental que el proyecto sea diseñado desde el inicio bajo estos principios. Se trata de elementos que definen cada espacio según necesidades concretas de control, gestión, ahorro, confort interior y seguridad en el hogar. 

Así, permite el control de diferentes ámbitos arquitectónicos del hogar. Veamos los principales.  

• Iluminación. Permite conectar con casi todos los dispositivos de una vivienda para conseguir el control lumínico de cualquier foco, incluso los de bajo consumo. Así, consume solamente la luz necesaria e incluso incorpora temporizadores, sensores de ocupación o programación horaria.
• Temperatura y ventilación. La domótica también permite controlar los sistemas de aire acondicionado, suelo radiante, calderas, etc., programando temperaturas específicas a franjas horarias. También permite abrir o cerrar ventanas a distancia e incorporar sensores de lluvia o sol. 
• Calefacción. Entre otras cosas, la arquitectura inteligente permite programar la calefacción a una determinada hora para alcanzar la temperatura idónea justo antes de llegar a casa. 

Accesibilidad y Seguridad. El acceso a la vivienda puede hacerse mediante chapas electrónicas de clave numérica en vez de cerraduras tradicionales y ser gestionados a través de apps en dispositivos móviles.

Ventajas de la arquitectura domótica 

• Ahorro Energético. Al incluir sistemas de control como sensores de movimiento o atenuadores se disminuye notablemente el gasto energético en iluminación y calefacción. 
• Seguridad. La domótica permite configurar un sistema de encendido y apagado de luces en el interior de la casa para simular habitabilidad durante periodos vacacionales. 
• Adaptabilidad. La arquitectura domótica es especialmente relevante para personas con movilidad reducida, al permitir gestionar de manera autosuficiente la configuración de la vivienda. 
• Comodidad y flexibilidad. Controlar si hemos olvidado cerrar bien la puerta o hemos dejado el gas encendido a través de nuestro móvil es otra de las grandes ventajas de la arquitectura inteligente. 
• Sostenibilidad: Permite sacar el máximo partido a la luz natural al programar el cierre de cortinas y persianas para controlar la luz natural y el calor que entra en la casa. Así, está íntimamente relacionada con la arquitectura bioclimática, al reducir el uso de los sistemas de climatización aprovechando el entorno natural de la casa.

Estas son las principales aplicaciones y ventajas de la arquitectura domótica o inteligente, que abarcan desde la iluminación y sistemas de climatización hasta sistemas de vigilancia, de riego o incluso prevención de incendios. Para que su uso sea el idóneo por parte del usuario final es fundamental la labor del equipo de arquitectos, que harán un diseño acorde a las necesidades específicas de cada unidad familiar.