La Simplicidad del Minimalismo
La arquitectura minimalista comenzó a tener una gran demanda a partir de los años 80, sobre todo en Londres y Nueva York. A día de hoy se ha convertido en un tipo de construcción muy solicitado por muchos clientes, haciendo que este estilo sea una de las mejores opciones dentro del sector arquitectónico moderno. En este artículo te explicaremos en qué consiste este tipo de arquitectura y cuáles son sus características principales.
¿De dónde proviene el minimalismo?
Como sabes, en el siglo XX se produjeron muchos cambios sociales y culturales y estos fueron los que hicieron que las edificaciones minimalistas aumentaran. Aunque antes de ese tiempo ya se utilizan ideas simples para reducir los elementos, los primeros arquitectos minimal se basaron en la tradición de la construcción de Japón, donde solo se escogían elementos necesarios. Así fue como poco a poco fue creciendo este estilo y hoy las empresas del sector podemos crear todo tipo de edificaciones sin lujos.
Fue así como el minimalismo nació para escapar de una vida urbana compleja y centrar la atención en los detalles esenciales de una obra.
¿Cuáles son las características del estilo minimalista en el sector arquitectónico?
La arquitectura minimal está basada en crear espacios elegantes y selectos, pero con el objetivo de utilizar la mínima cantidad de elementos. Para ello, los profesionales buscamos constantemente la forma de encajar formas sencillas y materiales simples en los proyectos solicitados por los clientes.
Colores
Los colores que solemos utilizar en este tipo de edificación son monocromáticos. Por tanto, si te gusta la variedad de muchos tonos de color, te recomendamos que elijas otro estilo. Por supuesto, siempre escucharemos tus ideas para acoplarlas al proyecto arquitectónico, pero si no queremos salirnos de la línea minimalista, será necesario que incorporemos únicamente tonos puros de bases monocromáticas.
En las arquitecturas minimalistas, en general, predomina la combinación de blancos, grises y negros para que podamos jugar con la profundidad visual. En las fachadas exteriores suele ser el color blanco el que adquiere todo el protagonismo.
Materiales
Los materiales que utilizamos para construir edificios o viviendas minimal suelen ser vidrios, maderas, piedras, aceros o cementos, entre otros. No obstante, sin importar el material que elijas, siempre apostaremos por su forma natural para no romper con la simplicidad que exige este modelo arquitectónico.
No olvides que menos es más y, por ello, enfocamos los proyectos hacia un aspecto funcional y no decorativo. Apostamos por el vidrio en paneles de fachada, utilizamos mobiliario sin adornos y centramos la atención en la iluminación natural para conseguir viviendas acogedoras y funcionales.
Diseños
Apostamos por las líneas rectas y reducimos al máximo todo tipo de decoración en fachadas y paredes interiores, porque muchas veces entorpece más que embellece. La sencillez en los espacios abiertos, la geometría recta y los diseños limpios son los factores más característicos de este estilo minimalista.
En conclusión, la arquitectura minimalista te permitirá disfrutar de acabados perfectos sin exceso de elementos. Enfocaremos tu proyecto en darle todo el protagonismo al espacio de tu edificación y dejaremos de lado todas las estridencias que puedan eclipsar el efecto minimal que buscamos.